Nuestro Carisma
Somos un grupo de hermanos, fundados por San Francisco de Asís, interesados en vivir relaciones horizontales, de hermano a hermano, en el seguimiento radical de Jesucristo, promotores de justicia y especial predilección por los pobres. Como instrumentos de reconciliación y de paz en el mundo de hoy, guiados por la acción del Espíritu del Señor, vamos por el mundo anunciando de palabra la paz. pero llevándola profundamente en el corazón. Nuestra tarea fundamental es la evangelización en servicio de la iglesia, por medio de actividades intelectuales y materiales, por el ejercicio del ministerio pastoral en parroquias, centros educativos, atención a pueblos indígenas y en otras instituciones eclesiásticas. Incorporados al pueblo de Dios. Respondiendo a las condiciones de un mundo en evolución estamos atentos a responder las necesidades que van surgiendo en nuestra sociedad de acuerdo con las iniciativas y orientaciones de la Iglesia.
Nuestros Orígenes
Nacidos en el siglo XIII, con la Forma de Vida aprobada por el Papa Honorio III el 29 de noviembre de 1223, los franciscanos llegamos a México el 13 de mayo de 1524 para fundar la “Custodia del Santo Evangelio”, que se convirtió en Provincia en 1536. Habiendo sido los primeros misioneros en llegar a estas tierras cubrimos la mayor parte de los territorios mexicanos, trabajamos con grupos de la más variada índole, aprendimos idiomas, compusimos gramáticas y vocabularios, tradujimos textos bíblicos a idiomas nativos y escribimos catecismos utilizando técnicas ideográficas completamente ajenas a la mente europea. A nuestro paso por las diversas regiones de México dejamos, además de un sin número de tradiciones populares, una bien marcada huella que cinco siglos después el viajero puede reconocer, entre otras cosas, en los monumentales conventos y en el arte religioso popular.